Y te escribo esto, porque muy probablemente no los tenga para decírtelo en la cara, por miedo a lo que pueda pasar, porque me importas demasiado... A veces tengo la sensación de que me quieres, recuerdo esa noche cuando trasnochamos juntos, aún noto esa sensación de felicidad extrema, ese sentimiento el cual solo puedes hacer florecer tú, con una simple sonrisa tuya, mis penas se ahogan, con un simple 'hola' veo el futuro nítido, y tengo fuerza para seguir para delante, no me importa lo que digan los demás. Princesa, eso me dices... y automáticamente una sonrisa invade mi cara, las mariposas en el estomago aparecen... Eso es estar enamorada, dicen...
Otras, veo que no, que no me quieres para nada, solo soy un simple juguete para ti, un día te aburrirás y me tirarás y me olvidarás y buscarás a otra con las que compartir más experiencias porque yo ya no te lleno. Busco respuestas y no las encuentro, tengo ganas de llorar, pero no lo hago porque sé que aun te tengo a mi lado. Ahora mismo estoy ciega, no veo tus intenciones, no veo donde quieres llevar todo esto, pero que sepas que mis 'te quieros' han sido y serán siempre verdaderos, que yo soy la que no te olvidaré nunca porque te veo demasiado perfecto, me has hecho sentir cosas que nadie ha conseguido hacerme sentir, que cuando te veo delante de mí, solo quiero parar el tiempo, envejecer a tu lado y siempre que me vea perdida, sola, estés allí cogiéndome la mano y con una linterna para iluminarme el camino, y tu sonrisa... quiero verla siempre, tus ojos que llenan los míos, te dije que te los robaría y lo haré, siempre cumplo mis promesas... Y ahora, sé lo que de verdad quiero en esta vida, estar junto a ti, estar contigo hasta el final, porque esta vida ya es demasiado triste y tu grandullón mío, la haces mejor.
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